“Hacer ganadería en zonas áridas es todo un desafío, pero estamos a la altura de la Pampa Humeda”, fue parte de las palabras de Leticia Calvente que recibió la distinción como Ganadera del año en la fiesta por el 90 aniversario de la Cámara de Comercio.
Leticia es médica veterinaria y desde 2020 tomó las riendas del establecimiento Don Pancho y continuó con el legado de Raúl, su padre.
“Yo creo que no se hace ganadería en esta zona si no lo hacemos en equipo”, afirmó Calvente y luego agregó “siempre trabajar en equipo es la mejor manera, por eso agradezco eternamente a mis amigos y colegas que están dispuestos a compartir lo que anda bien como así también lo que sale mal, porque realmente si no lo hacemos entre todos, esto no funciona”
Calvente reparte su vida entre Venado Tuerto donde está la familia y General Alvear en los que atiende los quehaceres del campo.
Con esta visión, es que la ganadera dijo totalmente convencida que “estamos con una hacienda excelente, tenemos animales que están genéticamente a la altura de la Pampa Húmeda, de la zona de la cuenca del Salado, y creo que eso es un esfuerzo de todos los ganaderos que trabajan día a día capacitándose y siguiendo adelante, por eso imaginemos lo que podría ser si tuviéramos unos milímetros más de lluvia, lo que seríamos”.
Para concluir, Leticia Calvente instó a todos a seguir adelante porque “así como es con la ganadería, lo mismo con nuestro país, seguramente lo mejor está por venir”.
Su pasión por la actividad pecuaria y la naturaleza
En este 2023 se cumplieron 42 años desde que Raúl tomó la decisión de adquirir el campo Don Pancho en la zona de Punta del Agua.
Desde entonces, ella siempre estuvo a su lado lo que le permitió adquirir todos los conocimientos en el manejo del campo y por supuesto, fue tomando ese gusto por la naturaleza y la vida de campo.
Una experiencia que la marcó profundamente y la guió en su futuro hacia la medicina veterinaria.
Hacia el año 2000, con el título de médica veterinaria partió a Estados Unidos para especializarse y regresó tres años más tarde y por esas cosas de la vida, se asentó en Venado Tuerto y formó una familia, pero nunca dejó de estar vinculada a su pasión que era el campo y los animales.
Hacia 2020 su vida terminaría de dar un brusco giro, Raúl, que estaba enfermo, falleció y en medio del dolor, tuvo que hacerse cargo completamente del manejo de las 7.000 hectáreas que formar parte del establecimiento Don Pancho.
A la experiencia acumulada a lo largo de los años junto a su padre le sumó los conocimientos adquiridos por su profesión. Además de adecuar los 7 kilómetros de acueductos que surcaban el campo para entregar agua a los animales, le incorporó 5 kilómetros más de cañerías.
Con apoyo de colegas a quienes una y otra vez fue en busca de consejos, incorporó nuevas técnicas en el manejo del rodeo y las pasturas. Además, avanzó un escalón más y a la cría de ganado le incorporó la recría y actualmente busca avanzar hacia la ganadería bajo riego.
En la actualidad dispone de 220 madres y su intención no es continuar cargando el campo de manera indiscriminada en la búsqueda únicamente de un rédito económico. Su preocupación más grande es mantener el campo en condiciones óptimas, no sobrecargarlo, no agotarlo, porque no todo es dinero, “hay que pensar en las futuras generaciones”.
Es hija de Raúl y Elsa, su hermana es Viviana y tiene dos hijos: Alejo y Ulises.
Esto dijo Leticia Calvente